Empieza el verano y cada día nos llegan titulares sobre el impacto del calor en hogares, barrios y ciudades. Por un lado, tenemos datos que nos cuentan que 2023 fue el año más caluroso de la historia en todo el mundo (según información de la NASA) o el tercero en España desde 1961, cuando comenzaron las mediciones. Y, por el otro, la AEMET calcula que en julio y agosto estaremos unos dos grados por encima de la media y que los fenómenos meteorológicos extremos serán más numerosos y de mayor envergadura.
Son datos científicos, pero la buena noticia es que existen medidas sencillas para aplicar en casa que funcionan bien y cuestan poco. Y como en Political Watch somos fans de los datos, pero más de la tecnología que mejora el mundo (como la del botijo, que es pura técnica hecha arte), os contamos cómo conseguirlo (sin recurrir al aire acondicionado, que es trampa):
- Cortinas y ventanas: en las horas de más calor, es recomendable cerrar ventanas y bajar persianas. Ábrelas durante la noche cuando las temperaturas del exterior bajen y puedan refrescar el interior de las casas. Las cortinas, cuanto más tupidas, mejor, porque nos protegerán más del calor exterior. Otra buena opción es rociarlas con un difusor de agua __a primera hora de la mañana o al volver a casa tras el trabajo. Gracias a la evaporación del agua, el calor se invertirá y se refrescará el interior. __
- Sábanas: apostar por las de algodón y cambiarlas a menudo.
- Luces: la iluminación con led, además de consumir mucho menos, ayuda a no calentar los hogares, ya que no aumentan su temperatura, al contrario de las halógenas.
- Electrodomésticos: por la misma razón, para que la energía necesaria para su funcionamiento no caliente las estancias, es mejor poner el lavavajillas o la lavadora en horas nocturnas, programando sus ciclos si es posible.
- La cocina también aumenta la temperatura, al encender fuegos y placas, por lo que, es recomendable mantener la puerta cerrada mientras la usas.
- Las plantas contribuyen a refrescar los ambientes tanto en el interior como en el exterior. Puedes hacer que tu fachada regule más el calor si pones plantas y las riegas bien prontito. También puedes optar por hablar con tu comunidad para colocar una envoltura vegetal. Descubre aquí algunos consejos.
- ¡El ordenador!: cuando acabes de trabajar (o de jugar), apaga el ordenador, porque si lo tienes encendido continuamente calentará tu habitación. ¿Sabías que todos los vatios que consumen para poder funcionar los transforman en calor, que luego evacuan fuera de la caja?
¿Y cuándo salimos a la calle?
Pues no sería difícil aplicar las medidas individuales anteriores a los espacios públicos para rebajarla temperatura de calles y plazas. Generar sombras con toldos, sombrillas y vegetación es fundamental para evitar golpes de calor. Por no hablar del valor de las zonas arboladas (cosas del enfriamiento evaporativo) y las limitaciones al tráfico (culpable de que el asfalto expela el calor que no pueda absorber y tremendo emisor de gases de efecto invernadero).
Reclámalos a tu ayuntamiento y únete con tus vecinos y vecinas para pensar juntos en formas de refrescar algunas zonas del barrio. Como han hecho en un colegio de Villaverde (Madrid), transformando su patio en un espacio común protegido del sol.
