Las propuestas remitidas a la Comisión para la Reconstrucción a través del nuevo buzón de participación ciudadana serán publicadas en la página web del Congreso de los Diputados para su conocimiento público, lo que supone un hito en la transparencia parlamentaria española
Comisión para la Reconstrucción Social y Económica
En el día de ayer, la Presidencia de la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica del Congreso de los Diputados decidió dar un importante paso adelante en materia de transparencia, que viene a complementar la apuesta realizada una semana antes por la participación ciudadana, al habilitar un buzón a través del cual la ciudadanía puede hacer llegar sus propuestas y sugerencias a los distintos grupos de trabajo que están debatiendo sobre la estrategia de reconstrucción post-COVID en sede parlamentaria.
La Comisión que preside el socialista Patxi López anunció ayer que “las propuestas remitidas a la Comisión a través del buzón de correo electrónico serán publicadas en la página web del Congreso para su conocimiento público, salvo indicación expresa en contrario en el mensaje de envío”. También se hará pública la documentación aportada por los comparecientes en el Plenario y los grupos de trabajo de la Comisión, siempre que éstos lo autoricen.
Con esta decisión, el Congreso viene a responder a la principal petición que le hicieron llegar más de 40 organizaciones y personas expertas el pasado lunes 1 de junio en una carta en la que solicitaban a Patxi López que garantizara “la publicidad oportuna y plena y el acceso a toda la información y documentación generada y aportada en el transcurso de las actividades de la citada Comisión y sus grupos de trabajo, incluida la información recogida a través del nuevo canal de participación, con plena garantía de la integridad de la misma y del cumplimiento de la normativa vigente”.
A raíz de esta decisión, el personal del Congreso a cargo del nuevo canal de participación ciudadana tiene una titánica tarea por delante: contactar con las cientos de organizaciones y personas individuales que ya habían enviado sus propuestas y aportaciones a través de este canal antes de que se habilitara la petición de consentimiento para hacerlas públicas. Desde aquí nos hacemos eco de este llamamiento y solicitamos a cualquiera de estas personas u organizaciones que envíen su consentimiento, sin el cual sus aportaciones no podrán ser publicadas, en cumplimiento de la legislación vigente en materia de protección de datos y garantía de los derechos digitales.
Por la falta de experiencia previa del Congreso en el desarrollo de herramientas de participación ciudadana y el escaso tiempo disponible (la Comisión para la Reconstrucción tiene una vida útil prevista de dos meses, de los que ya ha transcurrido más de la mitad) este primer mecanismo participativo tiene un alcance y una ambición limitada. No deja de ser un canal unidireccional de comunicación que no permite ninguna posterior interlocución ni partición entre los diputados y la ciudadanía ni de esta entre sí (utilidades que sí están disponibles en varias de las herramientas de participación ciudadana ya existentes en nuestro país como Kuorum, Consul u Osoigo). En cuanto al acceso a la información, ya anuncian desde el Congreso que el formato de publicación “no va a ser muy amigable pero es el único posible”, de hecho, ya es posible acceder a la web que ha habilitado el Congreso para ver las propuestas enviadas en las últimas horas.
Es por ello, que las organizaciones firmantes de la carta a Patxi López manifestaran su deseo de que “este mecanismo participativo y su experiencia de implementación permita ampliar horizontes y que sirva como modelo para articular un espacio de apertura en toda la actuación parlamentaria”. Y es que entre las organizaciones y personas firmantes se acumula la mayor experiencia de nuestro país en materia de transparencia, participación ciudadana, acceso a información, protección de informantes o incidencia pública.
Pero de todo ello ya habrá tiempo de hablar mañana. Hoy toca felicitar al Congreso como institución, y a las personas que a título individual han hecho suya esta causa, por los avances logrados que, aún con todas sus debilidades y deficiencias, suponen un hito de apertura y transparencia en los últimos 40 años de historia parlamentaria en España.
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