Coherencia
Los grandes retos de nuestra era son complejos y multidimensionales. Sus variables están tan interconectadas que cualquier solución real y duradera será holística y transversal o no será.
Ante este panorama, la coherencia se plantea como irrenunciable: necesitamos políticas donde los instrumentos económicos, sociales y ambientales se retroalimentan para la consecución de una sociedad más justa, sostenible y democrática.
En Political Watch trabajamos para que gobiernos, empresas y sociedad civil comprendan mejor las interacciones entre políticas y cómo sus decisiones de hoy pueden afectar al bienestar y al desarrollo sostenible de futuras generaciones y de personas viviendo en otros países.
Sabemos que diseñar e implementar políticas coherentes es un importante reto, que requiere de grandes dosis de voluntad política y de información. Trabajamos para que la falta de conocimiento deje de ser un obstáculo en su consecución.
Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible
La Agenda 2030 es una hoja de ruta global para dar respuesta a la pobreza y a los retos globales del desarrollo sostenible. Con ella, la comunidad internacional ha acordado por primera vez un conjunto de objetivos y prioridades comunes, que son indivisibles y que están interconectados.
En relación con la Agenda 2030, la coherencia implica considerar los efectos de las políticas en el bienestar humano desde una triple perspectiva: en las generaciones presentes en el propio territorio, en las generaciones futuras y en las personas que viven en otros países.
En Political Watch velamos (desde el análisis y la vigilancia ciudadana) para que los países y territorios, en su proceso de cumplimiento de los ODS, no generen impactos negativos en las perspectivas de desarrollo sostenible de otros países, especialmente los países en desarrollo. Y para que, al avanzar en el cumplimiento de los ODS, generen externalidades positivas sobre otros países y sobre los bienes públicos globales.
Comercio, inversión y desarrollo
El comercio internacional genera y destruye oportunidades económicas y sociales en todo el planeta. Su dimensión es tal, que para los países en desarrollo los ingresos del comercio son tres veces superiores a la suma de la ayuda al desarrollo, la condonación de deuda y las remesas que reciben.
Las reglas que rigen el comercio internacional son, por tanto, un elemento crucial en el diseño de las políticas de desarrollo y de lucha contra la pobreza. Establecen los límites al espacio político del que los Estados disponen para gobernar en defensa del interés general y sus acuerdos establecen el equilibrio entre derechos y obligaciones de poderes públicos y sector privado. Por eso Political Watch trabaja analizando la política comercial y su impacto sobre el desarrollo sostenible.
Durante décadas, la liberalización comercial se ha promovido como un fin en sí mismo y no como una herramienta supeditada a la consecución del bien común. El sistema comercial resultante está concebido a medida y beneficio de unos pocos intereses y carece de los mecanismos necesarios para gestionar sus impactos sobre la sociedad.
Un sistema comercial multilateral ordenado, equilibrado y justo es un “bien público global” al que no podemos renunciar. Su consecución es una de las grandes promesas incumplidas de la comunidad internacional en lo que va del siglo XXI.
En el ámbito del comercio internacional y la inversión extranjera, desde Political Watch llevamos a cabo proyectos para:
- Conocer las implicaciones que la política comercial tiene sobre las expectativas de desarrollo sostenible de terceros países.
- Analizar la inclusión del enfoque de desarrollo sostenible en los tratados internacionales comerciales y de inversión.
- Vigilar el impacto sobre los derechos humanos de inversiones de empresas españolas en países en desarrollo.